¡Sigue moviéndote!
¿Recuerdas la primera vez que te subiste a una bicicleta? Seguramente lo que más te costó trabajo fue aprender a balancear tu cuerpo y mantener el equilibrio, pero conforme pasaban los días, y después de algunas caídas, seguro fuiste mejorando. ¿Te acuerdas de cómo te hacía sudar y lo mucho que se te aceleraba elLeer más sobre ¡Sigue moviéndote![…]